Benedicto XVI se sobrepone a la agresión y clama por paz
El Papa envió un mensaje especial a Latinoamérica y en particular a Honduras
Ciudad del Vaticano.- Las fiestas navideñas tuvieron un inicio dramático cuando una mujer agredió al Papa en el Vaticano, aunque Benedicto XVI apareció ayer aparentemente en buena salud para impartir su bendición Urbi et Orbi a los peregrinos desde el balcón de la basílica de San Pedro.
En su mensaje, el pontífice instó a la solidaridad con los emigrantes forzados a abandonar sus países "a causa del hambre, la intolerancia o el deterioro ambiental" y llamó a Honduras, donde en julio se produjo un golpe de Estado, a "retomar el camino institucional", indicó AFP.
El Papa parecía sereno y en buena salud, tras la agresión que sufrió antes de la Misa de Gallo, cuando una mujer, Susanna Maiolo, una ítalo-suiza de 25 años, "aparentemente desequilibrada", saltó la barrera de seguridad, lo tomó por el cuello y lo derribó.
El incidente también provocó la caída del cardenal francés Roger Etchegaray, de 87 años, que se quebró un fémur.
En la misa de gallo, Benedicto XVI denunció "el egoísmo, tanto el colectivo como el individual", que "nos mantiene prisioneros de nuestros intereses y de nuestros deseos".
Saludos a Latinoamérica El pontífice envió un mensaje especial a Latinoamérica y en particular a Honduras, país que atraviesa una grave crisis política desde el golpe de Estado que derrocó en junio pasado al presidente Manuel Zelaya.
Navidad dividida En Belén, ciudad natal de Jesús, miles de cristianos celebraron la vigilia de Navidad, empañada por las restricciones provocadas por la ocupación israelí.
La misa de gallo fue celebrada por el patriarca latino de Jerusalén, Fuad Twal, en la iglesia franciscana de Santa Catalina, contigua a la basílica de la Natividad.
http://www.eluniversal.com/2009/12/26/int_art_benedicto-xvi-se-sob_1708211.shtml
