El teniente general que comanda la misión de Naciones Unidas salió ileso del ataque el domingo
Agencias Nueva York 30 JUL 2012 - 19:42 CET107
El general Babacar Gaye, en una conferencia de prensa en Damasco. / AFP
El convoy del teniente general Babacar gaye, jefe de la misión de observadores en Siria, fue atacado durante el fin de semana por fuerzas del Gobierno, según ha aclarado la tarde del lunes el secretario general de Naciones Unidas, Ban Ki-Moon. "El convoy del general Gaye fue atacado ayer [por el domingo] por el Ejército", ha asegurado Ban. "Afortunadamente", ha añadido, "no hubo heridos". El blindaje de los vehículos en los que se desplazaban evitó que los militares extranjeros sufrieran mayores daños.
"Atacaron el convoy del general Gaye. Más de una docena de vehículos armados fueron atacados y destruidos totalmente y es realmente una suerte que nadie haya resultado herido", ha dicho en rueda de prensa el secretario general, quien volvió a urgir a las partes a cesar la violencia y resolver el conflicto a través del diálogo.
La misión de observadores de Naciones Unidas, que llegó a tener hasta 300 soldados desplegados, ha reducido su presencia en Siria. Su tarea afrontó enormes dificultades desde los primeros días de su despliegue, alrededor de cuatro meses atrás. Ambas partes, el Ejército y los rebeldes que se han alzado en armas contra el régimen, despreciaron desde el primer día el plan que el exsecretario general de la ONU Kofi Annan diseñó para que se aplicara un alto el fuego en el país árabe.
Una advertencia de Al Qaeda a Irán
Hezbolá y Líbano son los eslabones más débiles en la cadena de intereses en el conflicto sirio Las viejas diferencias sectarias se han agrandando a medida que El Asad ha ganado terreno David Alandete 19 NOV 2013 - 17:01 CET 18 Un cuerpo calcinado entre los restos de un coche tras el atentado en Beirut. / Hussein Malla (AP) La intervención directa de Irán y la milicia chíta libanesa Hezbolá en la guerra siria, que le ha permitido al régimen de Bachar el Asad ganar terreno en los pasados meses, comienza ahora a tener sus consecuencias más graves. El eslabón más débil en esa cadena de intereses es Hezbolá, que aunque controla el gobierno de Líbano, se enfrenta a una creciente oposición en la población suní de su país y se ha visto como objetivo de una serie de ataques en su feudo en la Dahiya, en las afueras de Beirut. Quienes le hacen la oposición, como el Movimiento Futuro, ya han acusado a la milicia chiíta de ser causante indire...
